El DJ escocés Calvin Harris ha sido acusado de copiar elementos del clásico trance ‘Offshore’ de 1996, desatando polémica y una posible batalla legal.

Calvin Harris, una figura clave en la música electrónica global, está en el centro de una controversia tras el lanzamiento de su nuevo sencillo “Blessings”, junto a Clementine Douglas. El tema, estrenado el 9 de mayo de 2025, ya acumula más de 12 millones de reproducciones en Spotify. Sin embargo, ha sido señalado por Chicane (Nicholas Bracegirdle) como una posible copia de su emblemático track “Offshore” (1996).
Chicane compartió un video en redes sociales donde compara ambas canciones y afirma que son “casi idénticas”, destacando la similitud en la estructura melódica y los elementos instrumentales. “Estoy defendiendo mi propiedad intelectual”, aseguró el productor británico.
Por su parte, Calvin Harris respondió desde TikTok, calificando la acusación como “vergonzosa” y argumentando que “las similitudes son superficiales” y que “no es lo mismo”. Añadió que Chicane no inventó la guitarra ni los elementos musicales usados.
Este conflicto ha abierto un debate más amplio en la comunidad electrónica sobre los límites entre la inspiración creativa y el plagio musical. Chicane confirmó que se ha iniciado una investigación formal por derechos de autor debido al alcance viral del tema.
La disputa entre Harris y Chicane refleja los desafíos actuales de la industria musical, donde las influencias compartidas son frecuentes, pero las líneas legales siguen siendo complejas. El desenlace del caso podría marcar un precedente importante en la regulación de la creatividad musical en la era digital.