El género de estrategia en tiempo real (RTS) lleva mucho tiempo sin grandes noticias. A pesar de que las desarrolladoras producen varios juegos del género al año, rara vez encontramos noticias sobre un nuevo juego de estrategia en las primeras planas. Slipgate Ironworks, respaldado por 3D Realms, pretende cambiar esto con una propuesta que revive la época dorada del género.
El lanzamiento de Empire of Ants (Tower Five, 2024) y los intentos de Blizzard con Warcraft III nos han dejado tiempo sin ver un juego de estrategia en tiempo real puro. En una época donde Age of Empires es un juego gacha para celulares, Blizzard le da poco valor a sus IPs (Starcraft, Warcraft) y Electronic Arts revive sus juegos de estrategia noventeros, un juego hecho con pasión y cuidado se vuelve un acto de rebeldía en la industria.
Tempest Rising se siente como una combinación entre Command & Conquer y Starcraft II, recuperando la esencia de los RTS de 2010. Aunque visualmente atractivo, no apuesta en su mayoría por gráficos de última generación.
La historia del juego, que cuenta la lucha entre dos facciones tras una guerra nuclear, es sencilla pero bien establecida. La campaña sirve como un tutorial largo y detallado sobre cómo utilizar cada facción.
El desafío del juego radica en su amplia variedad de unidades y estructuras para cada facción, así como el balance entre ellas. Sin embargo, este nivel de profundidad también puede ser complicado para jugadores sin experiencia en el género.
Lo más destacado del juego es su desempeño y estabilidad, algo poco común en la industria actual. Aunque puede resultar poco amigable para jugadores casuales, para los fans de los juegos de estrategia, Tempest Rising es el juego que han estado esperando durante años.